Neurologia tics

Qué causa los tics

El síndrome de Tourette (ST) es un trastorno neurológico caracterizado por movimientos o sonidos vocales repentinos, repetitivos, rápidos y no deseados, denominados tics. El ST forma parte de un grupo de trastornos del sistema nervioso en desarrollo denominados trastornos por tics.

Los tics aparecen y desaparecen con el tiempo, variando en tipo, frecuencia, localización y gravedad.  Los primeros síntomas suelen aparecer entre los 5 y los 10 años, generalmente en la zona de la cabeza y el cuello, y pueden progresar hasta incluir los músculos del tronco y los brazos y las piernas. Los tics motores suelen aparecer antes de que se desarrollen los tics vocales y los tics simples suelen preceder a los complejos.

La mayoría de las personas con ST experimentan sus peores síntomas de tic en los primeros años de la adolescencia, pero los tics normalmente disminuyen y se controlan al final de la adolescencia o al principio de los 20 años. Para algunas personas, el ST puede ser una enfermedad crónica con síntomas que duran hasta la edad adulta. Muchas personas no necesitan tratamiento cuando los síntomas no interfieren en la vida diaria. Algunos individuos pueden llegar a estar libres de tics o dejar de necesitar medicación para controlar sus tics. En algunos casos, los tics pueden empeorar en la edad adulta. El ST no es una condición degenerativa (que continúa empeorando) y los individuos con ST tienen una esperanza de vida normal.

Trastorno de tics

ANTECEDENTES Los trastornos de tics que se presentan en la edad adulta se han descrito con poca frecuencia en la literatura médica. La mayoría de los informes describen trastornos de tics secundarios de aparición en la edad adulta causados por traumatismos, encefalitis y otras afecciones adquiridas. Sólo algunos informes describen trastornos de tic idiopáticos de inicio en la edad adulta, y la mayoría de estos casos representan trastornos de tic recurrentes en la infancia.

OBJETIVO Describir una gran serie de pacientes con trastornos de tics que se presentan durante la edad adulta, comparar las características clínicas entre los grupos de pacientes y llamar la atención sobre este trastorno neurológico potencialmente incapacitante y poco reconocido.

MÉTODOS Utilizando una base de datos informatizada, se identificaron todos los pacientes con trastornos de tics que se presentaron entre 1988 y 1998 a la clínica de trastornos del movimiento del Columbia-Presbyterian Medical Center después de los 21 años. Se revisaron retrospectivamente los historiales de los pacientes para obtener información demográfica, la edad de inicio de los tics, la fenomenología de los tics, la distribución, la presencia de síntomas sensoriales premonitorios y la supresión de los tics, los antecedentes familiares y las características psiquiátricas asociadas. Se revisaron las cintas de vídeo de estos pacientes para confirmar el diagnóstico y se obtuvo información sobre la discapacidad, el curso y la respuesta al tratamiento en una entrevista de seguimiento estructurada.

Síntomas de tics de ansiedad

Un tic es un movimiento motor o una vocalización repentina, repetitiva y no rítmica que involucra grupos musculares discretos[1][2] Los tics pueden ser invisibles para el observador, como la tensión abdominal o el crujido de los dedos del pie. Los tics motores y fónicos más comunes son, respectivamente, el parpadeo y el carraspeo[3].

Los tics deben distinguirse de los movimientos de trastornos como la corea, la distonía y la mioclonía; de las compulsiones del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) y de la actividad convulsiva;[4] y de los movimientos exhibidos en el trastorno de movimientos estereotípicos o entre los autistas (también conocidos como stimming)[5][6][7].

Los tics fónicos son sonidos involuntarios producidos al mover el aire por la nariz, la boca o la garganta. Pueden denominarse alternativamente tics verbales o tics vocales, pero la mayoría de los diagnosticadores prefieren el término tics fónicos para reflejar la noción de que las cuerdas vocales no están implicadas en todos los tics que producen sonido[8].

Los tics motores simples suelen ser movimientos repentinos, breves y sin sentido que suelen implicar a un solo grupo de músculos, como el parpadeo de los ojos, las sacudidas de la cabeza o el encogimiento de hombros.[9] Los tics motores pueden ser de una variedad infinita y pueden incluir movimientos como aplaudir, estirar el cuello, mover la boca, sacudir la cabeza, los brazos o las piernas y hacer muecas faciales.

Cómo calmar los tics

El síndrome de Tourette (ST) es un trastorno neurológico de inicio en la infancia caracterizado por múltiples tics motores y fónicos y una amplia gama de problemas de comportamiento, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).1 El Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, Quinta Edición (DSM-5) define el ST por la presencia de múltiples tics motores y fónicos con inicio antes de los 18 años y con una duración de al menos un año. Los estudios epidemiológicos han demostrado que entre el 20 y el 30 por ciento de los niños presentan tics en algún momento de su infancia, y entre el dos y el tres por ciento de los niños desarrollan el ST. Los síntomas son típicamente peores justo antes de la pubertad y mejoran espontáneamente a la edad de 20 años, pero en aproximadamente un tercio de los pacientes los síntomas persisten hasta la edad adulta.

No existe una prueba de diagnóstico para el ST y, por lo tanto, el reconocimiento del espectro completo de la fenomenología de los tics y de las diversas comorbilidades conductuales es fundamental para el diagnóstico. Los tics, el sello clínico del ST, son movimientos relativamente breves e intermitentes (tics motores) o sonidos (tics vocales o fónicos). Esta división en tics motores y vocales/fónicos, sin embargo, es artificial, porque los tics vocales/fónicos son en realidad tics motores que involucran la musculatura respiratoria, laríngea, faríngea, oral y nasal.